La Casa de Extremadura en Sevilla celebro en Oliva de la Frontera la XVII Matanza extremeña

El presidente de la Casa de Extremadura en Sevilla, Gonzalo Martín, coordinaba con enorme responsabilidad la salida de los autocares, con casi trescientas personas, que se desplazaban a Oliva de la Frontera para vivir "in situ" una de las tradicionales costumbres del pueblo extremeño. Socios y socias de esta entidad regional que preside Gonzalo partieron desde el Prado de San Sebastián hasta el atractivo y sereno pueblo de Oliva de la Frontera. En esta localidad se había programado la clásica Matanza Extremeña, que ya alcanza su XVII edición.

El propio presidente de la Casa de Extremadura en nuestra ciudad ha manifestado, con referencia a este acto, "que un año más, esta entidad, busca sus orígenes, rememora costumbres y encuentra el abrazo, entre pueblos, en torno a ese rito mágico y ancestral de la "Matanza", que fue siempre base de solidaridad y promesa a una despensa necesaria para eL sustento de nuestros hogares", Gonzalo Martín, como máximo responsable de esta institución que agrupa a tantos extremeños afincados en Sevilla, trabaja con enorme afán para poder reunir a todos lo que nacieron en los pueblos de Extremadura y difundir en la Tierra de María Santísima tantas costumbres, historias y tradiciones. En estos casos, unas veces ha sido la divulgación de la música de Extremadura y en otras hasta dar a conocer el momento actual de las Hurdes.

RECIBIMIENTO EN OLIVA DE LA FRONTERA

Fue agradable el viaje de ida entre Sevilla y Oliva de la Frontera, cubierto en poco menos de tres horas. En el pueblo olivareño, el alcalde Víctor Morera Mainar, dio la bienvenida al grupo en la Caseta Municipal. En este recinto, y con música de la charanga "Los Chéveres", fue servido un suculento desayuno, enriquecido con unas migas caseras con melón y perrunillas de Oliva de la Frontera.

Apasionante fue la exhibición realizada por los especialistas en este oficio que tomaron parte en la matanza didáctica del ganado porcino, con participación de muchas mujeres del pueblo. Todos los viajeros siguieron de forma muy directa el tradicional proceso de despiece, comprobando desde la selección del cerdo tras su engorde en la "montanera", para el sacrificio en las banquetas, hasta la habilidad y la destreza de los "matanceros" en la preparación y distribución de las estimadas carnes en sus distintas categorías, con el consiguiente control e inspección veterinaria.

En este recinto de la Caseta de Feria se celebraba además el Día de la Comarca de la Sierra Suroeste, con degustación y venta de los mejores productos de la zona.

HOMENAJE AL HUMANISTA TIMOTEO PÉREZ

También hubo tiempo para hacer una detenida visita a Oliva de la Frontera. El numeroso grupo de la Casa de Extremadura recorrió las calles principales de esta población. El alcalde de Oliva, Víctor Morera, y el presidente de la institución sevillana, Gonzalo Martín, rindieron un emotivo homenaje al humanista y pintor olivareño, Timoteo Pérez Rubio. En recuerdo de este insigne hijo de Oliva de la Frontera, gran personaje universal, esta localidad levantó un monumento, con su efigie, que está ubicado en la zona noble del pueblo. El alcalde y el presidente de la Casa de Extremadura después de glosar la ilustre figura de Timoteo Pérez colocaron una corona de laurel al pie del monumento.

Los socios y socias de la Casa de Extremadura que viajaron hasta Oliva de la Frontera conocieron paisajes, plazas y monumentos de esta acogedor pueblo. Llamó la atención el monumento dedicado a los contrabandistas, en homenaje dedicado a los españoles y portugueses que se vieron en la necesidad de hacer contrabando de alimentos, especialmente café, para poder subsistir en estas zonas.

Los cerca de 300 participantes en este programa de convivencia extremeña volvieron a reunirse en la Caseta Municipal de Oliva para el almuerzo. Se consumió, con buen tinto de la región, apetitosos aperitivos preparados con productos de la tierra, cocido de garbanzos, caldereta, pringá y la popular prueba de los embutidos ..chorizo y salchichón--, preparados con los tradicionales aliños. No faltó, durante el ágape, la música de la charanga y el baile de todos los asistentes a esta convivencia.

Al final de la jornada hubo emotivo homenaje y discursos de agradecimientos. El presidente de la Casa de Extremadura, Gonzalo Martín, hizo entregó de una placa de cerámica el alcalde de Oliva de la Frontera, Víctor Morera, como agradecimiento por la excelente acogida recibida por todos los participantes en esta tradicional convocatoria. El primer edil de este pueblo olivareño también entregó al presidente de la institución sevillana una reproducción en plata del santuario de la Virgen de Gracia. Víctor Morera dijo que el pueblo está abierto a todos los que quieran disfrutar de su espectacular marco natural. El alcalde también hizo referencia a todas las fiestas populares que se celebran durante el año en Oliva de la Frontera, destacando la Pasión Viviente que se organiza durante la Semana Santa.

Antes de llegar el final de la estancia para volver a Sevilla, el grupo estuvo en el Santuario de la Virgen de Gracia. Tras el canto de una Salve dedicada a la venerada imagen, la numerosa expedición regresó a la capital sevillana, con toda una carga de gratísimos recuerdos y vivencias.